La lucha por alcanzar el puesto en la Casa Blanca ha iniciado. Hillary, quien ya vivió allí cuando su esposo fue presidente, ansía ser la primera mujer en presidir al país de las barras y las estrellas, quiere darle seguimiento y mejorar lo hecho por su partido en los últimos ocho años bajo el mandato de Barack Obama. Donald, el magnate de Nueva York, quiere, a toda costa, cambiar los modos y las formas que se han llevado a cabo en los últimos años. Insiste en que, si no se reforma la metodología política, financiera y migratoria del país, una recesión volverá a hundir a los Estados Unidos y su identidad como raza quedará perdida.
A partir de lo que vimos ayer, y de lo que analizaron los expertos, éstos son los diez puntos más relevantes del primer debate presidencial entre Donald Trump y Hillary Clinton.
1.- El debate entre Hillary Clinton y Donald Trump rompió record de audiencia, llegando aproximadamente a 80.9 millones de personas sólo en Estados Unidos.
2.- El moderador, Lester Hult, no logró controlar los embates de ambos candidatos que, por momentos, se enfrascaron en discusiones sin sentido y desordenadas.
3.- Dentro del discurso de ambos candidatos, México fue un tema muy tocado, especialmente por la aversión que Trump tiene hacia el país y en especial hacia el tratado de libre comercio.
4.- Con seguridad se puede afirmar que nunca se había generado tanta expectativa hacia un debate presidencial de Estados Unidos en nuestro país.
5.- Se notó a un Donald Trump agresivo, poco político, entrometido y con poca preparación para argumentar sus propuestas.
6.- Hillary Clinton, con el colmillo que roza el suelo, supo esquivar varios ataques del candidato republicano, pero demostró una actitud grisácea y no tan llamativa.
7.- Sin duda es ejemplar cómo se vive con intensidad la carrera presidencial; fuera de normas, modales e hipocresías, generando así verdaderas rivalidades.
8.- Ejemplificar todo comparando con China y México no es un camino para persuadir al norteamericano, falta que Donald Trump se prepare mejor y no argumente con tanta precariedad de ideas.
9.- La poca respuesta que tuvo Hillary Clinton hacia el cuestionamiento que le hizo Trump sobre los correos que le hackearon, demuestra que la candidata demócrata aún no sabe cómo manejar ese error.
10.- Por un lado, hace ocho años el partido demócrata tuvo al primer presidente de color en la historia de los Estados Unidos, ahora, siguiendo el mismo patrón que trata de vislumbrar una cierta apertura, desean poner a la primera mujer presidente en la historia de la nación. Por el otro, al notar tan pocas opciones viables dentro del partido republicano, Donald Trump fue elegido para agarrarse de su fama y su impacto mediático para tratar de convencer a las clases conservadoras de Estados Unidos y así poder retomar la presidencia después del lamentable desempeño de su último representante; George W. Bush.