La Comisión Nacional de los Derechos Humanos incriminó a agentes policiacos de la ciudad de Allende, Coahuila, por haber cooperado con grupos de los zetas que en marzo de 2011 saquearon casas y cometieron desapariciones forzadas y asesinatos a pobladores de aquella entidad.
La CNDH acreditó que en la desaparición forzada de 38 personas integrantes de los zetas contaron con el apoyo y autorización de elementos de la Secretaría de Seguridad Pública Municipal.
El mismo informe, advirtió que esos mismos policías privaron de la libertad a cinco personas de manera ilegal y detuvieron a otras 34 con métodos arbitrarios.
La Comisión, presentará una queja formal ante la Contraloría Interna del Ayuntamiento de Allende en contra de sus agentes de seguridad y ésta ayudará a que el gobierno estatal coopere, ayude, y fortalezca los procesos de selección de los integrantes de los cuerpos de policía de los municipios fronterizos, de tal manera que se garantice el cumplimiento de sus deberes.