El Notario Público número 70, Shamir Fernández Hernández, quien, en la pasada administración, fue diputado local y actualmente es Presidente del PRI en Torreón, estaría impedido de asumir su nueva responsabilidad como Delegado de la Sedesol en Coahuila según la Ley del Notariado del estado.
Fernández, como lo ha reportado este mismo portal, no puede asumir el puesto como Delegado de la Secretaría de Desarrollo Social porque su notaría pública está en funciones.
El artículo sexto de la Ley del Notariado dice que el ejercicio de la función de notario es incompatible con cargos de funcionario o al servicio de cualquiera de los tres poderes del estado o de la Federación o de Entidades desconcentradas o descentralizadas del Gobierno Federal o Estatal.
El artículo, que acaba de ser reformado el pasado 29 de diciembre, tenía una cláusula que exceptuaba del supuesto a las personas que ocuparan cargos asistenciales, docentes y electorales. En su momento, Fernández también incumplía con la ley cuando era diputado local, pero hizo caso omiso de la misma.
Con la nueva modificación, la cláusula quedó de la siguiente manera:
«Se exceptúan de las incompatibilidades señaladas, los cargos docentes, asistenciales y de elección popular siempre que no se traten de Presidente de la República, Gobernador o Presidente Municipal.»
Con esto, un diputado, por ejemplo, ya puede ser notario público y ejercer su fiat, pero, en el caso de Shamir, con su nuevo nombramiento, tendría que pedir licencia para suspender su fíat notarial.
Además, también se reformaron los artículos 76 y 90 de la Ley del Notariado del Estado de Coahuila. Éstos, permitían, en caso del incumplimiento de algún requisito, la dispensa del gobernador, situación que hoy ya no es posible.
El incumplimiento de la Ley del Notariado, en específico en el caso de Fernández Hernández, según la misma ley, podría acarrear la nulidad de los trámites que éste realiza para sus clientes, por lo que también podría poner en riesgo el patrimonio de los mismos.
